Cuando pensamos en el acto de respirar pensamos en algo automático y que, como lo hemos estado haciendo desde que nacimos, ya está totalmente integrado.
Cuando oyes hablar de un curso de respiración te preguntas cómo es posible hacer un curso de algo tan natural como respirar.
Entonces te das cuenta de que llevas toda una vida respirando mal y realmente valoras el hecho de poder dedicarte unos días de retiro y agradeces que haya alguien como Danda, para guiarte y enseñarte a aprovechar tu potencial al máximo, porque respirar es mucho más que llenar los pulmones de aire. Respirar es vida!
Gracias a este curso he podido reeducarme y aprender a ser más consciente de mi respiración, además de ampliar y consolidar mis conocimientos sobre Pranayama, algo que sin duda me ayudará en mi día a día y a vivir de forma más plena.
Gracias por este regalo.
Rosa Sánchez
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